Sí,
siempre es mejor conocerlos porque cuando leemos o escribimos una historia, lo lógico es que pongamos
cara a nuestros protagonistas. Normalmente, cada persona tiene una preferencia
y se han abierto grandes debates sobre si los personajes masculinos se prefieren rubios o morenos; la mayoría
solemos imaginarlos sin barba ni bigote, y altos, bastante altos por aquello
de lo cómodo que es alzar la cara para mirar a los ojos…
Soñar
es fácil y una novela nos ofrece esa ventaja; luego cada uno sigue su vida y en paz. Pero para mí es muy importante
visualizar a los protagonistas desde el principio de la historia. Hasta los
secundarios tienen un rostro conocido porque estamos de acuerdo que es mucho
más fácil recordar y describir un actor famoso que, por ejemplo, a mi vecino el
del cuarto. Además, podría denunciarme por sacarle fotos para el booktrailer,
jajaja.
Ya
faltan muy pocos días para que “Niebla
en el pasado” esté en las librerías y por eso, he decidido poner un pequeño
avance.
Puedo
deciros que desde un principio imaginé a Nicole Gilbert, caracterizada por la
actriz Milla Jovovich. Busqué un rostro que inspirara determinación
y ternura; a mi entender, dos cualidades bastante opuestas y que me daba la
oportunidad de crear una personalidad atractiva. Necesitaba una mujer de ojos verdes y con aspecto de niña pero que al mirarla a los ojos pudieramos ver un arrojo muy grande. Y cuya sonrisa fuera capaz de cautivar a la más férrea de las voluntades.
3 comentarios:
¡Madre mía! Esa Nicole misteriosa y con mucho arrojo.
Yo quiero verle a él...
POniendo la miel en los labios al personal, eh??? Muy buena introducción, ahora como dice Yoli, queremos verle a él! jajaja
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